Bukele, El Secuestrador de Venezolanos! ¡Y Ni Un Ladrillo En Su Contra!

¡Ay, Venezuela, Venezuela! Cada día es una telenovela diferente. Y si creías que ya habíamos visto todo lo que este siglo XXI tiene para ofrecernos, prepárate, porque ahora tenemos un nuevo capítulo en el culebrón internacional, que involucra a Nayib Bukele, el presidente de El Salvador, y al siempre carismático Diosdado Cabello. A lo mejor pensabas que Bukele solo era famoso por sus bromas en Twitter o por sus proyectos tecnológicos que parecen sacados de un episodio de “Black Mirror”, pero no, este señor tiene un nuevo título: ¡secuestrador de venezolanos! ¿Cómo es eso, dirías tú? ¡Pues vamos a contártelo!

La Historia del "Secuestro Internacional"

Resulta que, en uno de esos momentos que solo Diosdado Cabello sabe cuándo aprovechar, nuestro querido secretario general del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), como buen tío político que se mete en todo, no dudó en calificar al presidente salvadoreño de "secuestrador". ¡Así como lo lees! Cabello, de esas personas que no le tienen miedo a nada, soltó la bomba y dijo en vivo: "Bukele cobra 2.000 dólares por cada venezolano secuestrado. ¡Secuestrador de venezolanos, no hay otra palabra!", casi como si fuera un agente secreto de la CIA, pero con más pasión y menos tecnología. Y si pensabas que esto era una frase más, bueno, ya sabes que Diosdado no suele usar frases sin chisme.

Pero, ¿por qué lo dijo? Bueno, parece que Bukele, en su intento por hacerle frente al fenómeno migratorio y de alguna manera acomodar a migrantes deportados de EE.UU., ha establecido unos “centros de detención” (una especie de cárcel moderna con Wi-Fi y mucho marketing en Instagram) en los cuales, según Cabello, el presidente de El Salvador cobra (¡sí, como si fuera un Uber pero para refugiados!) 2.000 dólares por cada venezolano que pasa por allí. ¡Casi un precio VIP! Al parecer, Bukele no solo se quedó con el negocio de las criptomonedas, sino que ahora también se está dedicando a "secuestrar" venezolanos como si estuviera montando un "tour internacional" de deportados, ¿y el resto del mundo? Pues, ¡se hace el loco!

¿Pero Cómo Así, Señor Cabello?

A ver, uno entiende que Cabello tiene su estilo particular de hablar, es como ese tío que siempre te cuenta las historias más épicas pero nunca termina el chisme. ¿Qué fue lo que realmente pasó? Básicamente, Bukele ha creado una serie de centros de reclusión para aquellos venezolanos que, en su paso por EE.UU., se ven atrapados en esa especie de rueda de la fortuna migratoria que va de un lado a otro sin rumbo fijo. Y según la denuncia, Bukele cobra dinero para “acoger” a esos migrantes, como si estuviera vendiendo entradas a un parque de diversiones, pero en vez de montaña rusa, el paseo es directo a un campo de detención en El Salvador. ¡Y ahí va la cosa!

“¡Eso no lo puedo permitir! ¡Secuestro! ¡Cobro! ¡Esto no tiene nombre!”, dijo Cabello, claramente con más indignación que cuando te das cuenta que el pan de cada día está más caro que la entrada a un concierto de reggaetón. Pero si lo pensamos bien, ¡2.000 dólares por persona! ¡Eso sí es un negocio! Claro, y con "centros de detención" que más parecen campos de concentración VIP, donde el wifi y el aire acondicionado son lo de menos, lo importante es lo que entra por las puertas. ¡Maduro debe estar viendo a Bukele con unos ojos que dicen: “¿Y yo por qué no me inventé esto primero?”!

La Reacción de El Salvador y El Mundo.

Lo más interesante de este asunto, es que el mundo no parece reaccionar como lo haría si fuera Maduro el que tuviera algo que ver con el secuestro de migrantes (porque para ellos, todo lo que hace Venezuela siempre está mal, sin importar si está bien o mal). Mientras tanto, Bukele sigue adelante con su plan, y el mundo solo observa, como si estuvieran en el cine viendo una película de "terror social" donde el villano no tiene cara, solo es un tipo que cobra por cada paso que dan los venezolanos. Es como si en esta película de suspenso nadie gritara "¡ya basta!" y todo el mundo se quedará mirando cómo los migrantes se convierten en piezas de una partida de ajedrez, mientras los demás hacen apuestas. ¡Qué nivel!

Lo cierto es que el gobierno de El Salvador no ha respondido con la contundencia que uno esperaría, y la reacción de la comunidad internacional está más fría que el aire acondicionado de esos centros de detención. ¡Nadie dice nada! Pero si eso fuera Venezuela, ¡ni te cuento! Ya estarían haciendo memes con la cara de Maduro en el cartel de "buscado" o de “se busca”, pero como Bukele está en el mismo "club de amigos" de los gringos, todo parece quedar en silencio. ¡Ajá! Venezuela siempre es la mala de la película.

"Secuestradores" Y "Políticos Internacionales".

Pero, como siempre, los venezolanos nos tomamos todo con humor. Imagínate que te dicen “¡Epa, broder! ¡Te llevan a El Salvador por 2.000 dólares!”, la primera pregunta sería: “¿Y eso me incluye el pasaje y la comida? ¿O solo el secuestro y el Wi-Fi?” Y es que en esta vida, mi pana, todo tiene un costo. Aunque sea secuestro, hay que darle gracias a Dios por el Wi-Fi, por lo menos se pueden ver series en Netflix mientras esperas que te liberen, ¿no?

En fin, el buen Diosdado Cabello lo dijo claro: “Bukele es un secuestrador”. Pero hay que reconocer que, por lo menos, lo dijo con humor, porque ¿qué otra cosa se puede hacer en una situación así? Si no puedes con el enemigo, mejor conviértelo en “el villano más ridículo”. ¡Y qué tal que Bukele termine cobrando entradas para un "tour de secuestro" donde el venezolano pueda disfrutar de una experiencia única! Con hotel 5 estrellas, Wi-Fi gratis, y una guía turística que te hable de todos los lugares de El Salvador que nunca pediste visitar.

Moraleja: En la vida, siempre hay dos maneras de ver las cosas: con el corazón y con el bolsillo. Y si el bolsillo manda, pues que le den a Bukele su cuota de “secuestrador internacional”. ¡Solo en Venezuela podríamos ver esta película de “La Guerra de las Divisas y los Secuestros de Migrantes”!

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